Bongo es el nombre de este animal, al cuál le ataban una pata a la cincha de la montura y le hacían galopar una hora a la cuerda de tres patas para someterlo.
Actualmente, Bongo se encuentra en ADE, una de las ONG beneficiarias por la compra del calendario, disfrutando de una vida realajada y feliz.
Es increíble hasta donde puede llegar la crueldad humana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario